El nuevo Barça de Xavi Pascual arrancó su segunda etapa en la Euroliga con una derrota tan ajustada como frustrante. Los azulgranas cayeron 74-73 ante un Anadolu Efes plagado de bajas, en un duelo que dominaban al descanso por once puntos, pero que acabó escapándose tras un tercer cuarto fatídico, un arbitraje muy desequilibrado —Efes lanzó 30 tiros libres, el triple que el Barça— y una falta extremadamente polémica a 0,3 segundos del final, en la que ni en la repetición se aprecia contacto claro.

Un Barça sólido en la primera parte

El conjunto catalán realizó una primera mitad convincente: seriedad defensiva, circulación fluida y un ritmo ofensivo sostenido. Esa versión les permitió abrir una brecha significativa en el segundo cuarto, alcanzando una ventaja de 13 puntos en los últimos compases antes del descanso (35-46).

El Barça incluso anotó los dos primeros puntos del tercer periodo, ampliando momentáneamente la diferencia a +13. Pero ahí terminó el control azulgrana.

Reacción de Efes: parcial de 19-2 y hundimiento del Barça en el tercer cuarto. 

Anadolu Efes reaccionó con una contundencia notable. Weiler-Babb, protagonista del momento clave del partido, clavó dos triples en pleno impulso local. Ese acierto alimentó un parcial demoledor de 19-2, que volteó el encuentro y colocó a los turcos arriba 54-50.

El técnico Igor Kokoskov explicó así la remontada:

“Cuando estábamos 11 abajo hablamos de ir posesión a posesión. Nada de pánico. Solo un buen stop defensivo y encadenar una pequeña racha. Ese tercer cuarto fue enorme para nosotros, defensivamente y ejecutando en los momentos clave”.

Efes cerró el periodo con ventaja de 58-53, tras mantener una agresividad constante en ambos lados de la pista.

Barça reacciona… pero Efes vuelve a golpear

Ya en el tramo decisivo, los turcos siguieron aprovechando cada visita a la línea —un factor determinante en el desarrollo del encuentro, con 30 tiros libres intentados— y un tip-in de Osmani tras un tiro libre fallado elevó la diferencia a 69-64 con menos de cuatro minutos por jugar.

El Barça tiró de experiencia para resistir. Encadenó un parcial de 1-9 sustentado en defensa y calma en media pista, culminado por un triple de Tomas Satoransky desde la esquina que puso a los azulgranas 70-73 a falta de 52 segundos.

La respuesta de Efes llegó de nuevo desde el tiro libre: Dessert anotó dos para acercar a los suyos (72-73). Barcelona desaprovechó su siguiente ataque y Efes se aseguró la última posesión.

La falta invisible que decidió el partido

En la acción final, Isaia Cordinier penetró a canasta, vio su primer intento bloqueado, capturó su propio rebote y, en un movimiento desesperado, lanzó un nuevo tiro. Los árbitros señalaron falta sobre él a falta de 0,3 segundos, supuestamente cometida por Jan Vesely.

Las imágenes de televisión, repetidas desde varios ángulos, no muestran un contacto claro, ni golpe en el brazo, ni desplazamiento del defensor. Aun así, la decisión se mantuvo.

Cordinier convirtió los dos tiros libres —parte de la enorme diferencia acumulada desde la personal— y sentenció el partido (74-73).

Tras el encuentro, el francés destacó la mentalidad del equipo:

“No buscamos excusas. Somos nosotros los que tenemos que hacer el trabajo. Cada partido hay que jugarlo creyendo que vamos a ganar”.

Conclusión: un debut con señales, errores y una polémica inevitable

El Barça mostró tramos de identidad y compromiso en su estreno con Pascual, especialmente en la primera mitad y en la reacción final. Pero el equipo se desplomó tras el descanso, volvió a sufrir un pésimo parcial en el tercer cuarto y se hundió ante un Efes mucho más agresivo y respaldado por un arbitraje que dejó cifras incomprensibles: 30 tiros libres para los turcos por solo 11 para los catalanes.

A ello se sumó un desenlace decidido por una falta que ni con la repetición se aprecia, un final que marcó el rumbo de un encuentro que el Barça tuvo muy controlado y acabó perdiendo.