El nuevo Barça ya muestra señales de identidad, y la primera es la defensa. Los de Pascual se llevaron un partido muy cerrado (61-72) tras un cuarto final de enorme concentración, con Shengelia y Laprovittola marcando el camino en los momentos calientes.
El Barça volvió a sonreír en la Liga Endesa. Y lo hizo desde la defensa. En el primer partido de Xavi Pascual en ACB tras su regreso al banquillo azulgrana, el conjunto catalán se impuso al Dreamland Gran Canaria (61-72) en un duelo áspero, trabajado y de anotación baja, donde la identidad del técnico de Gavà empezó a asomar desde el primer minuto. El equipo firmó su mejor rendimiento atrás en semanas, sin conceder 18 puntos en ninguno de los cuatro cuartos, y construyó desde ahí un triunfo imprescindible para seguir vivo en la lucha por la Copa del Rey.
Tornike Shengelia (14 puntos y 6 rebotes) volvió a ser un faro competitivo en la pintura, mientras que Nico Laprovittola (14 puntos, 4/4 en triples) ejerció de termómetro en ataque. Ambos lideraron una ofensiva que, sin ser brillante, supo golpear en los momentos determinantes. En los insulares, Mike Tobey —exazulgrana— sostuvo al equipo con 16 puntos y 9 rebotes en una actuación notable.
El estreno no fue plácido. El Barça arrancó en el Gran Canaria Arena con porcentajes muy bajos, un preocupante 0/4 en tiros libres y cuatro pérdidas que recordaron los vicios recientes. Angola castigó desde el perímetro y puso el 13-8, pero el conjunto catalán supo contener daños para cerrar el primer acto solo tres abajo (17-14).
La diferencia, sin embargo, estaba atrás: el Barça ya mostraba otra actitud defensiva, un punto más de agresividad y de control del rebote, aunque aún alternaba buenos minutos con despistes que permitían a los de Lakovic encontrar scoring en finales de posesión.
El segundo periodo fue el primer signo claro del cambio. Pascual agitó el quinteto, el equipo ganó solidez defensiva y enlazó un 0-8 de salida con triples de Cale y Laprovittola para ponerse por delante (17-22). El Barça solo encajó 12 puntos en el cuarto, una cifra simbólica para la nueva etapa.
El plan defensivo anulaba parcialmente a Isaiah Wong (solo cuatro puntos al descanso), aunque Mike Tobey sí hacía daño en la pintura. Aun así, el conjunto visitante controló el ritmo hasta llegar al descanso con un 29-32 que dejó la sensación de que la renta pudo ser mayor.
El tercer cuarto fue un pulso físico y táctico con muchos errores en ambos aros. Clyburn y Laprovittola firmaron los primeros aciertos, pero Gran Canaria reaccionó con un parcial de 8-0 para recuperar ventaja (39-36). A Pascual no le tembló el pulso: retiró a Willy Hernangómez, superado por Tobey, y devolvió a Vesely para estabilizar atrás.
El periodo se cerró en absoluta igualdad (46-46). Todo quedaba abierto para el asalto final.
Los grandes jugadores aparecen cuando importa. Y ahí estuvieron Shengelia y Laprovittola. El georgiano abrió el último cuarto con dos acciones marca de la casa y Lapro encendió la mecha desde el triple para poner el +6 (48-54). El argentino, impecable desde el perímetro, clavó su cuarto triple sin fallo para llevar la ventaja a siete puntos (52-59) a poco más de cuatro minutos.
Gran Canaria respondió como pudo, pero su mal día desde la línea de libres (62%) penalizó cualquier intento de remontada. Clyburn remató el trabajo con dos acciones consecutivas que llevaron el choque al 56-65. Un triple de Punter y un cierre defensivo autoritario sellaron un triunfo incuestionable (61-72).
El Barça equilibra su balance (4-4) y asciende a la séptima plaza en Liga Endesa, un movimiento imprescindible en la pelea por la Copa. El miércoles, el reencuentro con el Palau en Euroliga ante Asvel marcará la primera presentación del equipo de Pascual ante su público.
De momento, una certeza: este Barça vuelve a competir desde la defensa. Y así, la nueva etapa empieza con aire fresco, identidad y una victoria tan necesaria como alentadora.
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