La Euroliga ha vuelto a tomar medidas disciplinarias contra Dimitris Giannakopoulos, máximo accionista del Panathinaikos AKTOR Atenas, esta vez con una de las sanciones económicas más severas impuestas a un dirigente en la historia reciente de la competición. La organización ha multado con 100.000 euros al empresario griego por sus reiteradas declaraciones en redes sociales durante la serie de playoffs que enfrentó al conjunto ateniense con el Anadolu Efes.

El origen de la sanción se remonta a las publicaciones realizadas por Giannakopoulos tras la derrota del Panathinaikos en el cuarto partido de la serie, que obligó a disputar un quinto y definitivo encuentro. En un tono agresivo y provocador, el dirigente no solo cuestionó abiertamente la actuación arbitral, sino que también lanzó graves acusaciones contra la propia Euroliga y su gestión: “Eras mafia, eres mafia, dejarás de ser mafia”, escribió desde su cuenta personal, etiquetando incluso a la cuenta oficial del torneo.

La Euroliga no tardó en reaccionar. En un comunicado oficial, explicó los motivos de la sanción, amparándose en el Artículo 24.2, apartados b), c) y d) del Código Disciplinario de EuroLeague Basketball, que penaliza las declaraciones que dañen la imagen de la competición, sus miembros o sus árbitros. “El Sr. Dimitris Giannakopoulos ha sido sancionado con una multa que asciende a un total de 100.000 € por declaraciones en redes sociales relativas a la actuación arbitral, comentarios despectivos y daños hacia otros clubes, individuos y la organización de la EuroLeague Basketball”, rezaba el comunicado.

Además, el propietario heleno fue un paso más allá al invitar públicamente al presidente de la Euroliga, Dejan Bodiroga, y al director de arbitraje, Daniel Hierrezuelo, a presenciar en directo el quinto partido de la serie, en un gesto que muchos interpretaron como una provocación más que una invitación diplomática.

Antecedentes de fricción

Esta no es la primera vez que Giannakopoulos se enfrenta a sanciones por parte de la Euroliga. En marzo de este mismo año, fue multado con 15.000 euros por criticar a los árbitros en sus redes sociales. Pero el episodio más significativo hasta la fecha había ocurrido en diciembre de 2022, cuando fue sancionado con 80.000 euros y vetado de los pabellones durante tres partidos como local por conductas similares.

La reincidencia en este tipo de comportamientos ha llevado a la Euroliga a endurecer su postura. Esta multa de seis cifras no solo responde al contenido de las recientes publicaciones, sino que también marca un precedente disciplinario en la competición, reforzando su intención de proteger la imagen de la liga y la integridad de sus miembros frente a ataques personales o institucionales.

Con el Panathinaikos aún inmerso en la lucha por un billete al Final Four, esta nueva polémica vuelve a colocar a su máximo dirigente en el centro de la atención mediática y plantea una vez más el debate sobre los límites del discurso público en redes sociales, especialmente cuando proviene de figuras de alto perfil dentro del baloncesto europeo.

¿Crees que esta sanción cambiará el comportamiento de Giannakopoulos en el futuro o simplemente es otro capítulo más en su tensa relación con la Euroliga?